Alberta, Canadá, 20 de junio de 2013.
Mi Maestro – Ajustador del Pensamiento.
Tema: “Idolatría.”
Recibido por Renée.
Mi Maestro: “La idolatría es un concepto impregnado de una gran cantidad de miedo y rodeado de una ‘pesadez’ emocional, ya que las personas en la antigüedad utilizaban tótems materialmente semejantes a los animales. Algunos adoraban a seres humanos individuales, caracterizaciones de fenómenos naturales, soles, estrellas, e incluso partes de la anatomía humana.
“Los ídolos comúnmente son parte de la infancia de una religión evolutiva. Se hacen parte de la cultura, y surgen rituales –a menudo de naturaleza supersticiosa y basados en el miedo– en torno a la utilización de ídolos que simbolizan el poder y la prosperidad, la fertilidad, la belleza, la sabiduría, y todas las necesidades y deseos que los individuos proyectan en un símbolo físico. Esta es una necesidad de la mente humana en desarrollo para pacificar sus temores, y una necesidad de la parte más primitiva de la personalidad humana para identificar símbolos y obtener una consecuente gratificación a partir de una burda forma de adoración asociada a las necesidades esenciales del ego o de la criatura.
“Esta forma de adoración cruda e inmadura, frecuentemente está impregnada de superstición y pensamiento mágico, una curiosa mezcla de egoísmo y admiración, así como de veneración hacia los fenómenos naturales, y a menudo hacia los procesos que implican la creación, la procreación, el crecimiento, el nacimiento, el desarrollo, la actividad sexual, y todos los fenómenos observables vitales o que dan vida.
“El avance de la religión evolutiva depende de la receptividad de los individuos dentro de una sociedad ante las verdaderas fuerzas espiritualizadoras, y de las capacidades de aprendizaje que tienen estos individuos receptivos para sintonizar con el Ajustador interno y con los Ayudantes de la Mente de la Espíritu Madre, así como con el Espíritu de la Verdad en tiempos más recientes –desde el otorgamiento de Cristo Miguel en Urantia.
“El apego de las religiones evolutivas a la simbología no es necesariamente siempre perjudicial para el avance de la Verdad; sin embargo, la comprensión profunda y fundamental para el avance de una religión evolutiva es, de hecho, la aceptación de la morada del Creador en el corazón y la mente de cada ser humano, junto con el concepto-creencia de una ‘entidad espiritual’ que crece en el interior del ser humano: el alma morontial.”
Mi Maestro – Ajustador del Pensamiento.
Tema: “Idolatría.”
Recibido por Renée.
Mi Maestro: “La idolatría es un concepto impregnado de una gran cantidad de miedo y rodeado de una ‘pesadez’ emocional, ya que las personas en la antigüedad utilizaban tótems materialmente semejantes a los animales. Algunos adoraban a seres humanos individuales, caracterizaciones de fenómenos naturales, soles, estrellas, e incluso partes de la anatomía humana.
“Los ídolos comúnmente son parte de la infancia de una religión evolutiva. Se hacen parte de la cultura, y surgen rituales –a menudo de naturaleza supersticiosa y basados en el miedo– en torno a la utilización de ídolos que simbolizan el poder y la prosperidad, la fertilidad, la belleza, la sabiduría, y todas las necesidades y deseos que los individuos proyectan en un símbolo físico. Esta es una necesidad de la mente humana en desarrollo para pacificar sus temores, y una necesidad de la parte más primitiva de la personalidad humana para identificar símbolos y obtener una consecuente gratificación a partir de una burda forma de adoración asociada a las necesidades esenciales del ego o de la criatura.
“Esta forma de adoración cruda e inmadura, frecuentemente está impregnada de superstición y pensamiento mágico, una curiosa mezcla de egoísmo y admiración, así como de veneración hacia los fenómenos naturales, y a menudo hacia los procesos que implican la creación, la procreación, el crecimiento, el nacimiento, el desarrollo, la actividad sexual, y todos los fenómenos observables vitales o que dan vida.
“El avance de la religión evolutiva depende de la receptividad de los individuos dentro de una sociedad ante las verdaderas fuerzas espiritualizadoras, y de las capacidades de aprendizaje que tienen estos individuos receptivos para sintonizar con el Ajustador interno y con los Ayudantes de la Mente de la Espíritu Madre, así como con el Espíritu de la Verdad en tiempos más recientes –desde el otorgamiento de Cristo Miguel en Urantia.
“El apego de las religiones evolutivas a la simbología no es necesariamente siempre perjudicial para el avance de la Verdad; sin embargo, la comprensión profunda y fundamental para el avance de una religión evolutiva es, de hecho, la aceptación de la morada del Creador en el corazón y la mente de cada ser humano, junto con el concepto-creencia de una ‘entidad espiritual’ que crece en el interior del ser humano: el alma morontial.”
Traducido por Perla Téllez Garza.
© Grupo de Progreso 11:11.
Has encendido una luz que se convertirá en un fuego deslumbrante — ABC-22.
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